Arles cerró su feria con una imponente corrida de gran presencia del afamado hierro de Victorino Martín, fue una corrida brava, exigente y por supuesto con sus clásicas complicaciones, pues destacaron por sus famosos «alimañas» y a su vez por sus humilladas embestidas. José Garrido tuvo el peor lote de la tarde, pero mostró el gran momento por el que pasa dejando grandes pasajes. Clemente se postuló como un candidato firme a torero revelación de la temporada, pues cada tarde del torero galo viene a ser una lección magistral de torero con capacidad para ser una figura importante del toreo francés. Adriano dejó su gusto, poso y saber estar en la cara sobre todo del sexto, al que cuajó de manera soberbia, otro torero a tener muy en cuenta en plazas españolas.