La plaza de toros de Villaluenga del Rosario acogió un bello espectáculo en el que se pudieron ver tres vertientes diferentes del toreo. Pues del toreo a caballo hizo gala la amazona francesa Lea Vicens, quien dio una lección de doma y saber estar sobre todo en la lidia de su segundo astado con el que alcanzó las cotas más altas. Por otro lado, destacó la profundidad del peruano Joaquín Galdós quien anduvo con gran facilidad y gusto durante todo el festejo, al igual que Lea Vicens, lo mejor llegó en su segundo. Por último el joven novillero Bonmatí Bohórquez puso las cartas sobre la mesa para mostrar un toreo pausado y templado con el que logró dejar un garan aroma de cierto regusto.